La fotografía no está muy nítida, pero se trata, claramente, de un bonito ejemplar de cuchillo canario que bien resalta su afiligranado cabo bicolor. Siempre he dicho que me encantan los cabos blanquinegros, sobre todo los que tienen casquillos dorados, como es el caso. Se aprecian 21 piezas, que a mi parecer, son de material sintético. Las incrustaciones, son en material blanco no metálico, algo más extendido en los ejemplares realizados a partir de la década de los 60´s. No se aprecia el material empleado para confeccionar la hoja, pero parece, por la vaina y la proporción respecto a la mano de su dueño, que se trata de una hoja de 18 o 19 cms.
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